viernes, 3 de abril de 2009

Entre confusiones, chismes y mentiras

Además de sortear la gran cantidad de riesgos de origen tecnológico, propios de nuestra sociedad contemporánea, y los llamados riesgos naturales cuya frecuencia viene en aumento por el deterioro de nuestro planeta, debemos enfrentar otros de tipo social para los cuales nunca nos han preparado. No existen entidades para la prevención y atención de desastres originados por el chisme, la mentira o las malas interpretaciones.

Riesgos desde la confusión. La pérdida de orientación o capacidad de ubicarse correctamente en el mundo, en el tiempo, y en el espacio, o de la incapacidad de recordar correctamente acontecimientos anteriores es lo que usualmente llamamos confusión.

Cuando es inminente el riesgo, puede presentarse confusión, desorden, incertidumbre y desorientación entre la población. En países, como el nuestro, donde la cultura de gestión de riesgos aún es incipiente, los desastres pueden llevar a toda una comunidad a la confusión y el caos. El desastre crece al afectarse el funcionamiento normal de las instituciones, incrementándose el número de afectados.

La forma como se comunica el riesgo, por otra parte, crea más confusión. Un comportamiento normal, en estado de emergencia, es consultar los medios de comunicación. Sin embargo, los medios tampoco están preparados para el desastre. Surge, entonces, la opinión en contra de la información objetiva: “creemos que…”, “existe la sospecha de…”, “según fuentes…”, “un radioaficionado nos informa…”, son algunas expresiones en medio del caos y la confusión.

Pero, también, corremos el riesgo que nos confundan. Hace algunos años me encontraba caminando con un amigo por alguna calle de mi ciudad. Al cabo de un rato nos sentamos para descansar; en cuestión de segundos nos vimos rodeados de policías. ¡Ellos fueron!, escuché en medio de la confusión. Estaba confundido y, al parecer, nos estaban confundiendo. Dos muchachos entre 13 y 15 años nos señalaban como responsables de algo que había ocurrido. Mientras un policía se disponía a colocarnos las esposas, desfilaron por mi mente posibles escenarios de algún crimen cometido… ¡Muchachos, nos están confundiendo, obsérvennos bien!, fue una frase que repetía vanamente. ¡Sí, ellos fueron! Confirmaban nuestros acusadores. Cuando todo intento de probar nuestra inocencia parecía no hallar eco, aparecieron dos adultos informando que los autores del delito habían sido detenidos con los objetos robados… se trataba de un robo. La confusión había cesado, nuestros acusadores escondieron sus caras al notar nuestra mirada de reproche. Sin embargo, me preguntaba de regreso a casa: ¿Cuál sería nuestro destino si los verdaderos culpables hubiesen escapado?, ¿qué sería de nosotros si en lugar de un robo hubiese sido un delito de grandes proporciones?, ¿cuántos inocentes están purgando una pena por causa de la confusión?

Riesgo por el chisme. Uno de los enemigos más importantes que tienen las comunidades en riesgo es el chisme o el rumor. Pichón-Riviere en su obra Psicología de la vida cotidiana cita: "El rumor es la comunicación masiva y difusa, centrada en la información de que un hecho de características no explicitas va a suceder". Tal como lo enuncia Kasperson, la transmisión a través de cada nodo de amplificación del rumor, termina por distorsionar la información original.
Los chismes son informaciones parciales, a veces falsas o poco verificadas, a veces mal intencionadas o propagandísticas, que se difunden rápidamente en un determinado grupo o sociedad. En situaciones de riesgo, los rumores son muy frecuentes pudiendo generar otros riesgos. Los chismes o rumores pueden conducir a conductas de pánico. Por ejemplo, hace algunos años circuló un rumor por Internet que anunciaba la quiebra de una entidad financiera. Por culpa de este rumor, dicha entidad estuvo al borde del desastre.

Sin embargo, no todo chisme es malintencionado o carente de veracidad. Algunas organizaciones se valen del chisme para hacer circular información importante que puede ayudar a prevenir desastres. Lo cierto es que los rumores abundan antes o después de cualquier desastre natural, tecnológico o social.

A continuación describimos cuatro casos conocidos en los que el chisme ha jugado un papel muy importante

1. El crack de 1929. A propósito de la crisis financiera actual. El pánico financiero es uno de los ejemplos clásicos del chisme o el rumor.

En marzo de 1929 aún continuaban las subidas fuertes, sin embargo, comenzaron a circular rumores de que la Reserva Federal preparaba medidas que pudieran paliar posibles recesiones y caídas económicas. Los nervios empezaron a fluir. Grandes magnates empezaron a salirse. El índice cayó 9,5 puntos. El martes 26, los nervios estaban desatados y se vendía lo que se podía. Los intereses se dispararon en un día hasta el 20%., sin embargo, Charles Mitchell, utilizó el dinero del Banco de la Reserva Federal para cubrir las ventas y eso frenó la caída e hizo recuperar la confianza. Aún así, aquel segundo día de pánico, la Bolsa cayó 15 puntos.

http://sobrehistoria.com/el-crack-del-29-el-mayor-desastre-bursatil-de-la-historia/


2. Y2K, el cambio de milenio. Pocos años antes de terminar el siglo XX, se propagó el rumor de un posible fallo de las computadoras por el cambio de fecha. Esta profecía apocalíptica se extendió rápidamente por todo el mundo. El rumor del efecto 2000 (Year 2000 o Y2K) afirmaba que millones de computadoras se bloquearían o dejarían de funcionar. La causa del desastre en ciernes era un error de diseño de vieja data. En las computadoras de ese entonces, los dígitos de las fechas de los años funcionaban con las dos últimas cifras. Así las cosas, el 1 de enero de 2000 las computadoras no sabrían si estaban en el 2000, en el 1900 o en el 2100. Según el rumor, se tomaría la fecha como 1900 y, si no se corregía, los programas instalados incurrirían en cálculos cuyos resultados serían desastrosos. Surgieron, entonces, las posibles soluciones y los técnicos de la computación hicieron su agosto. Recuerdo que se ofrecían desde programas eliminadores del bicho Y2K (bug) hasta chips que garantizaban el cero error. Los que decidimos no comprar la medicina preventiva, recurrimos a realizar copias de seguridad y esperar el nuevo milenio. Recuerdo que después de dar los tradicionales “feliz año nuevo”, mi primera acción del nuevo milenio fue encender mi PC… Luego de unos segundos… mi anticuada computadora funcionaba perfectamente. Ejecuté uno que otro programa, verificando que el famoso Y2K era una falsa alarma. No obstante, para justificar el rumor, se publicaron otros rumores que daban cuenta de fallos de semáforos en Jamaica, cuentas bancarias en Japón y uno que otro satélite despistado. Pero, hasta donde sé, fueron sólo rumores.

3. Guerra contra Irak, entre rumores y mentiras. No sabría decir si el rumor de armas de destrucción masiva en Irak fue sólo eso… un rumor. Sin embargo, los intereses petroleros en este país, modela un nuevo chisme o rumor: “las mentiras de Bush”.

El senador republicano Ritter, en su momento, expresaba: “No podemos ir a la guerra basado en los rumores y la especulación, Antes de enviar a decenas de miles de tropas norteamericanas a pelear, matar y ser matado en nuestro nombre, tenemos que estar absolutamente seguros que hay una amenaza que merezca la guerra, que merezca el sacrificio”.

Sin embargo, se inició la guerra con fundamento en el rumor o, en mi opinión, en los intereses económicos (petroleros). Pero, ojo, es mi opinión; es decir, no tengo las suficientes pruebas para afirmar que ello sea cierto. Así que espero no se convierta en otro rumor o chisme.

4. Gripe Aviar. Desde hace algunos años le he seguido la pista a este riesgo con tendencias a pandemia (véase “De un brote a la pandemia”, en http://rincondelriesgo.blogspot.com/2006/08/de-un-brote-la-pandemia-la-real.html. En la parte final de este Rincón, exponía mi preocupación por el virus:

Lo que la mayoría de los legos ignoramos es el ¿por qué se preocupan los científicos? La respuesta es simple, ya vivimos lo estragos del virus H1N1, el cual mutó en 1918, durante la Primera Guerra Mundial, provocando la epidemia de la llamada gripe española, que mató entre 20 y 40 millones de personas. Este número de muertes fue superior al de la misma guerra, superior al de la famosa peste negra. Fue bautizada así porque, en aquellos años, España era de los pocos países de Europa donde no había censura por la guerra, por lo que fue la prensa española la primera en informar sobre la epidemia”.

Si bien el virus H5N1 no ha presentado tan desolador panorama, los científicos conocedores de los posibles efectos de una mutación, conformaron un bloque común que permitiera detener el avance del virus. La pandemia de 1918 se propagó en tres meses en Norteamérica, tiempo aproximado del viaje en barco desde Europa. En nuestra época, sería en unas cuantas horas.

Lo curioso de esta pesadilla en ciernes, es que no se ha propagado vía rumor por dos motivos. El primero obedece a las pocas muertes que causó la pandemia (menos de 200) y el segundo, para evitar el pánico. Sin embargo, ha circulado por la red otro tipo de rumor, a la cual le hago algunos comentarios:

¿Sabes que el virus de la gripe aviar fue descubierto hace nueve años en Vietnam?
Falso, existen diferentes variantes de la gripe, una de ellas la de 1918

¿Sabes que desde entonces han muerto apenas cien personas EN EL MUNDO TODOS ESTOS AÑOS?
Falso, en parte. Si lo que se quiere informar es la poca mortalidad, bastaría con decir que son pocos los decesos ocasionados por este virus. No obstante, el hecho que existan personas muertas, por pocas que sean, es de gran preocupación científica.

¿Sabes que los norteamericanos fueron los que alertaron de la eficacia del TAMIFLU (antiviral humano) como preventivo?

¿Sabes que el TAMIFLU apenas alivia algunos síntomas de la gripe común?

¿Sabes que su eficacia ante la gripe común está cuestionada por gran parte de la comunidad científica?

¿Sabes que ante un SUPUESTO virus mutante, como el H5N1, el TAMIFLU apenas aliviara la enfermedad?

¿Sabes que la gripe aviar, hasta la fecha, solo afecta a las aves?
Contradicción con la segunda afirmación

¿Sabes quién comercializa el TAMIFLU? LABORATORIOS ROCHE

¿Sabes a quién compró ROCHE la patente del TAMIFLU en 1996?

Y un largo etcétera.

Desconozco el propósito de este rumor. Lo que sí podemos evidenciar es el poder de la red como propagador del chisme y el rumor. Finalmente, quiero aportar un poco al chisme:

¿Sabes que no todo lo que se dice en la Red es cierto?

¿Sabes que el chisme es una estrategia para acabar con la reputación de una persona o de una organización?

¿Sabes que es sorprendente el número de personas que creen en el chisme?

Lo inquietante del rumor es nuestra ignorancia sobre su veracidad. Recientemente en Medellín ha circulado un rumor sobre grupos de limpieza social. Según el rumor, después de las 10 de la noche se “liquidarán” aquellos jóvenes que se encuentren en la calle. ¿Verdad o mentira?, ¿cuál es el verdadero propósito del rumor? Lo cierto es que muchos jóvenes dudan, antes de salir después de las 10 de la noche. Ese es el poder del rumor… sembrar la semilla de la duda.